"Vivo en Estados Unidos, aunque nací en Viena y residdí allí mucho tiempo. En Estados Unidos uno de los derechos más importantes es la libertad de expresión. He tenido problemas con la censura, por citar un ejemplo, en 1953 se me achacó la dureza d ela palabra virgen, que aparecía en mi película the Moon is blue, cosa que parece difícil de creer. Para mí no hubiera sido difícil dar unos cuantos cortes a la pleícula y dejar a todo el mundo satisfecho, pero creo que cada uno en su profesión, directores de cine, periodistas, escritores... cualquiera que sea, tenemos el derecho y el deber de defender nuestra libertad de expresión; porque atacar este derecho es el primer paso hacia una dictadura, hacia un gobierno totalitario, sea de derechas o de izquierdas, podría sobrevivir si los ciudadanos ejercen su derecho a opinar libremente. Creo que es muy importante luchar por esto y esa es la razón por la que siempre me he enfrentado a la censura y he conseguido seguir trabajando. Ahora ya no hay censura en Estados Unidos. Espero que sea siempre así. es lo que respondo cuando me preguntan sobre el tema. Nunca he defendido otra postura"
Otto Preminger
teatro de Ontario, Toronto, octubre, 1970
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